En muchas ocasiones la inercia y las dificultades tientan a las empresas a seguir un camino más fácil.  Por eso es importante tener un destino, y el destino en las empresas se llama «misión«. Pero me pregunto: ¿siguen las empresas teniendo una misión?… ¿es necesario? Coca Cola es uno de los ejemplos más claros de cómo una misión bien definida garantiza el éxito.

La misión es el motivo por el que una empresa existe, la respuesta al «para qué» ha sido creada. Identifica también quién eres y dónde tienes que llegar. Todos sabemos lo que representa tener una misión, y por ello no debemos confundirlo con tener unos objetivos. La principal diferencia entre misión y objetivos es que estos últimos son, o deberían ser, específicos y medibles y la misión es una orientación intangible. Es el primer elemento en la columna vertebral estratégica de la marca, que debe seguir el siguiente esquema:

1. MISIÓN – ¿Para qué estamos aquí?
2. VISIÓN  – ¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Cómo vemos el futuro?
3. VALORES – ¿Cómo debemos ser para lograrlo?
4. OBJETIVOS – ¿Cuáles son los pasos?
5. ESTRATEGIAS – ¿Cómo vamos a conseguir cada uno de esos pasos?

La misión es un requisito básico e imprescindible no sólo para las grandes empresas, sino también para las PYMES, para los autónomos y para los proyectos personales de cualquier tipo. ¿Por qué tu empresa debe tener una misión?

La misión define la VISIÓN de la compañía
Si la misión es el porqué, la visión es el rumbo que debemos seguir para no perdernos. Son aquellas actuaciones que debemos llevar a cabo para ser fieles a nuestra misión. La visión nos describe el futuro deseable y el camino por el que lo conseguiremos. Del futuro dependen los pasos que demos hoy, no lo olvides («previsión»).
Es el primer paso para crear la cultura corporativa (VALOR)
La misión determina también los valores que debe tener, vivir y transmitir una compañía. En el día a día, esos valores se convierten en la cultura corporativa en la que los empleados son el pilar fundamental.
Es el eje sobre el que giran otros aspectos de la compañía
Ayuda a determinar los objetivos y las estrategias, pero además es esencial en la construcción de la imagen corporativa y su posterior comunicación («emisión») a través tus mensajes publicitarios y acciones de branding. Que tu marca sea conocida por lo que es y por lo que quiere llegar a ser.
Es la mejor brújula
Establecer la misión y la visión de la empresa nos servirá de guía en la toma de decisiones. En ocasiones las marcas se dejan llevar, realizan acciones por inercia, moda o por «estar ahí». A esto se le suma el gran número de elecciones que hay que tomar en el día a día y que pueden hacer que se vaya perdiendo el enfoque. Con el tiempo, esas pequeñas desviaciones pueden hacernos perder el rumbo. Cuando esto pase y no sepamos hacia dónde ir podemos preguntarnos: ¿Esto me acerca o me aleja de mi misión? Si te estás alejando de tu misión es que no estás haciendo las cosas bien.
Sirve para identificar recursos y necesidades
Tener bien definida la misión y la visión de la empresa nos facilitará la labor de saber con qué recursos debemos contar para conseguirlo y establecer unas prioridades para la consecución de ese fin.


¿Como elaborar tu misión?

  • Recuerda que la misión la realizas para ti y para tus empleados. No hace falta que redactes la misión de tu compañía estilo Shakespeare ni que utilices clichés como: «lo importante es el cliente», «la base de nuestra empresa son las personas» o «nos esforzamos en ser cada día mejores»… Lo dicen tantas empresas que ya no significa nada. No te identifica. La misión es un compromiso entre tu empresa, tus empleados y tú, ni siquiera hace falta que tus clientes la conozcan (aunque lo recomiendo). Los empleados deben interiorizarla para ser partícipes e involucrarse, de ahí viene la palabra «comisión» aunque ahora se haya limitado su significado.
  • Hazte tres preguntas: ¿qué? ¿a quién? y ¿para qué?
  • Sé claro. Las ideas brillantes no necesitan adornos. Expón claramente a dónde quieres llegar y por qué estás aquí.
  • Busca inspirar. La misión debe ser positiva y alentadora. Ej.: Ford  «Formamos una familia con diversidad global, con un legado orgulloso, comprometida apasionadamente en proporcionar productos y servicios de primera calidad». La misión tiene que tener un gran componente aspiracional.
  • Sé concreto y breve: una misión no debería tener más tres o cuatro puntos y cada uno de ellos no ocupar más de una línea. Intenta decir lo máximo con el menor número de palabras posible y no al contrario.

Después de hablar sobre qué es, por qué es importante y cómo realizar una misión para tu empresa, me gustaría que viéramos un ejemplo que me parece que habla por sí solo y resume perfectamente todo lo anterior. Es el caso de Coca Cola y Pepsi.

Misión de Coca-Cola

A simple vista y sin detenerme por el momento en un análisis más profundo se puede vislumbrar cómo la misión de Coca Cola parece mucho más inspirada y motivadora.

En ella destaca uno de los ejes principales de su comunicación y posicionamiento durante las últimas décadas como es el «inspirar momentos de optimismo y felicidad». Coca Cola se ha apoderado de una de las palabras más poderosas en la mente de los individuos: la felicidad. ¿Quién no desearía que su marca fuera asociada a tal concepto? Coca Cola va un paso más allá: su deseo es «refrescar el mundo» ni más ni menos.

En contraposición tenemos la misión de Pepsi que bajo mi punto de vista ha sido redactada de forma muy convencional y desapasionada. Podemos hacer una prueba: cambia en la misión de Pepsi el texto de: «Productos de alimentación y bebidas de conveniencia» por «neumáticos de automovil» o «relojes de lujo»… ¿ya? Efectivamente, el texto de esta misión vale para cualquiera.

La misión de Coca Cola es fundamental para entender su comunicación y su estrategia de marca. Les ha llevado incluso a crear el «instituto de la felicidad» donde personas tan destacadas como Eduardo Punset o Alejandra Vallejo-Nágera colaboran en el estudio y divulgación de conocimiento en el campo de la felicidad; incluso se ha creado un programa diario para la televisión: «la felicidad en cuatro minutos». Esto es crear marca y saber quién eres.

Sin embargo, Pepsi ha optado por no tener una estrategia clara. Cada campaña apunta a una dirección diferente por si a fuerza de probar una y otra vez dan con la fórmula secreta del éxito, sin darse cuenta que caminan sin rumbo.  ¿Puede ser que alguna vez acierten?… Puede. Mientras, Coca Cola sigue ganando terreno en la mente y corazón de sus clientes.

Para finalizar sólo añadir que leer la misión de Pepsi me recordó la conversación de Alicia con el Gato de Cheshire en «Alicia en el país de las maravillas» y que dice así:

—Minino, minino… —llamó Alicia tímidamente, sin estar muy segura de si al gato le gustaría que le llamasen así—. ¿Podría decirme, por favor, por qué camino debo seguir?
—Eso depende, en gran parte, del sitio a donde quieras ir —repuso el gato.
—No me importa mucho donde sea… —declaró Alicia.
—Entonces no tiene importancia el camino que sigas… —contestó el gato.
—…siempre que llegue a alguna parte —agregó la muchacha, como para completar la explicación.
—Puedes estar segura de eso, siempre que camines lo suficiente —declaró el minino.

¿Tú que opinas? ¿Crees que todas las empresas deben tener una misión? ¿Qué crees que debería hacer Pepsi?

Links y documentación para ampliar el artículo:
Estás aquí para ser feliz
Misión y visión de Coca Cola
Misión y visión de Pepsi
Instituto de la felicidad de Coca Cola (web)
Video: la felicidad en 4 minutos (los amigos)
Video: la felicidad en 4 minutos (cosas de niños)